Un nuevo procedimiento mejorará el diagnóstico del deterioro cognitivo desde los primeros síntomas

La Consejería de Salud y Consumo, a través de la Secretaría General de Planificación Asistencia y Consumo, ha publicado el nuevo Proceso Asistencial sobre Deterioro Cognitivo en el que se aborda la afección desde la sospecha, permitiendo el diagnóstico en fase temprana y la posibilidad de establecer actuaciones que favorezcan una atención de calidad a estos pacientes y sus cuidadores desde el inicio de la sintomatología.

En la elaboración del proceso asistencial han participado profesionales de neurología, medicina interna, medicina familiar y comunitaria, enfermería, trabajo social y farmacia hospitalaria de diferentes provincias y centros sanitarios de Andalucía con el objetivo de mejorar la calidad asistencial de las personas con deterioro cognitivo. Para ello, se aportan recomendaciones que facilitan la coordinación entre los profesionales de diferentes ámbitos asistenciales y que disminuyen la variabilidad no explicada de las actividades dirigidas a las personas afectadas.

El proceso asistencial, además, se apoya en la evidencia científica para establecer recomendaciones que impacten en los resultados, orientando las actividades al diagnóstico, la calidad de la prescripción y la realización de pruebas complementarias. Asimismo, aborda el tratamiento de los síntomas conductuales, que suelen ser difíciles de gestionar por parte de la familia y cuidadores y contempla la elaboración de un Plan de Acción Personalizado compartido por todos los profesionales que intervienen en la atención de las personas con deterioro cognitivo. Otros aspectos que se han tenido en cuenta son la valoración de cuidados paliativos y la realización de las voluntades vitales anticipadas.

Respecto a la metodología, el desarrollo se ha basado en las recomendaciones provenientes de Guías de Práctica Clínica seleccionadas, cuya calidad se determinó a través de la herramienta AGREE-II y mediante acuerdos de grupo de los profesionales que participaron en su elaboración. También se han incorporado aportaciones de diferentes sociedades científicas y asociaciones que han colaborado en la revisión final.

Raquel Gallardo Avilés, coordinadora metodológica, y Emilio Franco Macías, coordinador científico del nuevo proceso ssistencial sobre deterioro cognitivo.

Raquel Gallardo Avilés, coordinadora metodológica, y Emilio Franco Macías, coordinador científico del nuevo proceso asistencial sobre deterioro cognitivo.

La presentación de este nuevo proceso asistencial corrió a cargo de su coordinador científico, Emilio Franco Macías, especialista en neurología, y de la coordinadora metodológica, Raquel Gallardo Avilés, técnica del Servicio de Calidad y Procesos de la Secretaría General de Planificación Asistencial y Consumo de la Consejería de Salud y Consumo, en el Congreso de la Sociedad Andaluza de Neurología, celebrado en la ciudad de Cádiz.

Sobre el deterioro cognitivo

El deterioro cognitivo y su principal causa, la enfermedad de Alzheimer, constituyen un problema de salud de primer orden. El envejecimiento progresivo de la población y la ausencia de un tratamiento efectivo para detener la progresión de la enfermedad agravan este problema.

De acuerdo con los estudios realizados en España, la prevalencia de esta enfermedad ronda el 0,05 % entre las personas de 40 a 65 años, el 1,07 % en la franja de edad comprendida entre los 65 y los 69 años, el 3,4 % entre los 70 y 74 años, el 6,9 % en las personas de 75 a 79 años, el 12,1 % entre los 80 y los 84 años, el 20,1 % de 85 a 89 años, y el 39,2 % entre los mayores de 90 años. Tomando los datos poblacionales del Instituto Nacional de Estadística (INE) y aplicando estas cifras de prevalencia, el número de las personas afectadas en España supera los 700.000 entre las que sobrepasan los 40 años. En 2025, la cifra de enfermos se habrá duplicado y se acercará a los dos millones de personas.