La Consejería de Salud y Políticas Sociales ha activado nuevas medidas a través de su Plan de Contingencia para hacer frente a la gripe e infecciones respiratorias agudas (IRA) en esta época del año en la que se suceden los encuentros y reuniones sociales y familiares. La anticipación vuelve a ser nuevamente la clave para afrontar el aumento que esas patologías generan durante estas fechas en la demanda asistencial, con altos picos de frecuentación en los servicios sanitarios y en los puntos de urgencias y de atención continuada.
En este Plan de Contingencia el primer nivel de la cadena de atención es Atención Primaria. La consejera de Salud y Políticas Sociales, María Martín, recuerda la necesidad de “concienciarnos de la importancia de ser atendidos en el nivel más adecuado a nuestra situación clínica y que utilicemos, en primer lugar, los recursos de Atención Primaria, para blindar así las Urgencias del hospital para la atención a los casos de mayor gravedad”. La consejera subraya, además, la relevancia que tienen la prevención y el autocuidado.
El Plan de Contingencia de la Gripe e IRA establece la coordinación de los servicios y recursos de Atención Primaria y hospitalaria del SERIS para optimizar la atención a la gripe y sus complicaciones, con la colaboración de la Dirección General de Salud Pública, departamento a quien compete la vigilancia epidemiológica y la promoción de la salud.
Teniendo en cuenta los indicadores epidemiológicos de la gripe y de las infecciones agudas respiratorias, así como la presión asistencial de cada momento, las medidas del Plan de Contingencia se van activando de forma secuencial. En esta época del año se han activado las propias del nivel 1 (de los 4 que tiene el Plan, además del nivel 0 que comenzó en octubre).
En el nivel 1 los indicadores asistenciales de referencia son los siguientes: 3 días 2 días consecutivos con > 260 pacientes atendidos en urgencias; con un índice de ocupación >95 % 2 días consecutivos; >20 pacientes pendientes de cama 2 días consecutivos y >60 ingresos 2 días consecutivos. Las acciones previstas consisten en la ampliación de camas de HAD a 80 camas; apertura del segundo control 6A (10 camas); la apertura de la unidad post alta para agilizar altas en ambulancias; y un segundo adjunto de guardia de presencia física en Medicina Interna.
Medidas preventivas ante enfermedades infecciosas respiratorias
La prevención y el autocuidado son esenciales y, por ello, la Consejería de Salud y Políticas Sociales ha expuesto diferentes medidas y recomendaciones con el fin de prevenir las enfermedades infecciones respiratorias propias de la temporada de invierno y de las fiestas navideñas. Son medidas y recomendaciones relevantes a lo largo de todo el año, si bien es importante prestar especial atención a la circulación estacional de virus respiratorios.
La vacunación es la medida más eficaz para prevenir las infecciones de transmisión respiratoria como la gripe y la COVID-19, así como sus complicaciones. En La Rioja, la vacunación se inició la primera semana de octubre y continúa vigente en este momento. Se puede solicitar cita para vacunación en el centro de salud o a través del teléfono 941298333.
Además de la vacunación, existen otras medidas que es importante recordar como:
- Intensificar medidas higiénicas, especialmente la higiene de manos.
- Taparse la boca al toser o al estornudar con la parte interna del codo o con pañuelos desechables.
- No reutilizar los pañuelos empleados al estornudar o al limpiar las secreciones nasales.
- Priorizar la utilización de espacios al aire libre y evitar las aglomeraciones.
- Ventilar correctamente los espacios.
- Recomendar, en la medida de lo posible, la minimización de las interacciones sociales en aquellas personas que tienen sintomatología respiratoria, así como el uso de mascarilla quirúrgica durante esas interacciones, especialmente si van a tener contacto con personas vulnerables.
La utilización de la mascarilla es una herramienta fundamental en el control de la transmisión de enfermedades infecciosas por vía respiratoria debido a que su uso por parte de la persona enferma reduce la emisión de aerosoles generados por esta al respirar, hablar, gritar, toser o estornudar, y también constituye una barrera física para el receptor.
Para evitar la saturación de los centros de salud y hospitales, se recomienda a los pacientes que sufran gripe y Covid no acudir a Urgencias a menos que sea absolutamente necesario y se den una serie de circunstancias:
- Cuando exista sensación de falta de aire, ahogo o dificultad para respirar con normalidad.
- Cuando existe dolor en el pecho o con tos muy intensa.
- Si se tiene fiebre alta durante 48 horas que no remite con la medicación habitual.
- Si se pertenece a un grupo vulnerable como personas inmunodeprimidas o con enfermedades crónicas, embarazadas, o personas que pertenecen a algún otro grupo de riesgo.
Asimismo, es importante seguir una serie de recomendaciones frente a las bajas temperaturas como:
- En el exterior es conveniente respirar por la nariz y no por la boca, ya que el aire se calienta al pasar por las fosas nasales y así disminuye el frío que llega a los pulmones.
- Extremar la precaución en caso de encontrar hielo en las calles. Un elevado porcentaje de lesiones relacionadas con el frío tiene que ver con caídas al resbalar sobre placas. Es conveniente usar calzado antideslizante.
- Prestar una mayor atención a las personas que puedan estar en situación de vulnerabilidad. En caso necesario, contactar con un profesional sanitario.
- El uso de varias capas de ropa fina protege más que una sola gruesa, al formar cámaras de aire aislantes entre ellas.
- Al utilizar braseros o chimenea es conveniente ventilar la casa con frecuencia para evitar la acumulación de CO2. Se recomienda hacerlo al menos dos veces al día, durante 15 minutos, para asegurar la renovación del aire.
- No tomar medicamentos sin receta médica. Algunos precipitan los problemas derivados de la exposición al frío.
- Seguir una alimentación variada: consumir diariamente fruta, beber líquidos, sobre todo agua, y bebidas calientes.
- Mantenerse informado sobre las previsiones meteorológicas antes de salir de casa.
Gripe e IRA
La gripe es una enfermedad infecciosa, que se transmite de personas infectadas a pacientes vulnerables principalmente mediante gotas y aerosoles. La población pediátrica se cree que puede jugar un importante papel en el proceso de transmisión en periódicos epidémicos.
Típicamente la infección por virus de la gripe se va a propagar en forma de olas epidémicas anuales, si bien en periodos interepidémicos pueden detectarse brotes, especialmente en residencias sociosanitarias y centros donde conviva población vulnerable.
Hay múltiples factores que van a influir en la severidad de la infección, la virulencia de la cepa que circula esa temporada tiene un peso determinante que, sumado a la vulnerabilidad de la población afectada, el porcentaje de cobertura vacunal alcanzado y la coexistencia de otros procesos respiratorios (SARS.Cov2, VRS…) van a condicionar la evolución y la frecuentación de los centros sanitarios.
Las epidemias estacionales pueden llegar a afectar a un porcentaje elevado de la población, originando un aumento de ingresos hospitalarios por la propia infección y por descompensaciones secundarias, que a su vez condicionan una elevada presión asistencial y una gran dificultad de gestionar de forma ágil los servicios de urgencias además de un aumento de la morbimortalidad por estas causas.
Las infecciones respiratorias agudas (IRA), son las enfermedades más frecuentes en la población general y la primera causa mundial de mortalidad por enfermedad transmisible, suponen un claro aumento de la demanda asistencial en atención primaria y en los servicios de urgencias hospitalarios.
En las temporadas no pandémicas, se calcula que la tasa de infección por gripe en adultos varía entre 1-15 %, llegando al 30 % en escolares. Se estima que, en todo el mundo, la gripe causa cada año alrededor de 5 millones de casos de enfermedad grave y unos 500.000-650.000 fallecimientos.