En los últimos años, el sector jurídico ha experimentado una transformación significativa con la aparición del concepto de NewLaw. Este término se refiere a un nuevo modelo de prestación de servicios legales que rompe con las estructuras tradicionales de los bufetes de abogados y busca responder a las nuevas demandas del mercado. NewLaw no solo implica un cambio en la forma de operar de las firmas legales, sino también en el uso de tecnologías emergentes y la adaptación a un entorno más ágil y eficiente.
NewLaw se define como una nueva forma de organización y prestación de servicios legales que se distancia de los modelos tradicionales, conocidos como «BigLaw». Mientras que BigLaw se basa en estructuras jerárquicas, tarifas horarias y un enfoque centralizado, NewLaw se centra en la flexibilidad, la tecnología y la eficiencia. Las empresas NewLaw adoptan modelos de negocio más ágiles, utilizan plataformas digitales y aprovechan la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático para automatizar tareas repetitivas y reducir costos.
A diferencia de los bufetes tradicionales, las empresas NewLaw pueden operar sin una sede física, contratar abogados independientes y ofrecer precios más competitivos. Este modelo permite una mayor adaptación a las necesidades específicas de los clientes, promoviendo la transparencia y la personalización de los servicios legales.
Los másteres del área jurídica de la Universidad Loyola están completamente adaptados ya a este concepto del NewLaw. Los profesionales que imparten clase vienen de grandes despachos de abogados y empresas con servicios jurídicos, como Andersen, KPMG, Cuatrecasas o Garrigues, que están incorporando todas las herramientas digitales a sus servicios, reorganizando sus modelos de negocio y apostan más por la especialización de sus profesionales. Todo ello, se enseña en los másteres de Loyola desde una perspectiva práctica y experiencial.
Y precisamente, Loyola oferta el Máster Universitario en Abogacía, junto con másteres enfocados en la Asesoría Jurídica de Empresas, la Asesoría y Consultoría Laboral y la Asesoría y Tributación Fiscal para impulsar la formación especializada de sus estudiantes y que se adentren en el mercado laboral lo más preparados posibles.
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- Uso intensivo de la tecnología: Las empresas NewLaw integran herramientas digitales avanzadas, como la inteligencia artificial (IA), el aprendizaje automático y la automatización de documentos legales. Estas tecnologías permiten la revisión de grandes volúmenes de información legal de forma más rápida y precisa.
- Modelos de precios flexibles: En lugar de las tarifas horarias tradicionales, NewLaw ofrece precios fijos o basados en resultados. Esto proporciona mayor certidumbre para los clientes y fomenta una relación de confianza.
- Estructuras descentralizadas: Las empresas NewLaw suelen operar sin la necesidad de una oficina física. Los abogados pueden trabajar de forma remota o por proyectos, lo que reduce costos y permite una mayor flexibilidad.
- Enfoque en la eficiencia operativa: Se busca la reducción de costos y la optimización de los procesos legales, eliminando tareas redundantes a través de la automatización y el uso de plataformas de colaboración.
- Adaptación a la demanda del cliente: Los clientes exigen servicios legales más ágiles, accesibles y transparentes. NewLaw responde a estas necesidades con un enfoque más orientado al cliente.
Con el NewLaw se ha redefinido el papel del abogado porque la automatización de tareas repetitivas, como la revisión de contratos, permite que los abogados se enfoquen en actividades de mayor valor agregado, como la estrategia legal y la negociación.
También, ha permitido acercar el acceso a la justicia a un mayor número de ciudadanos. Con la reducción de costos, los servicios legales se vuelven más accesibles para pequeñas y medianas empresas (PYMES) e individuos que antes no podían permitirse el acceso a bufetes tradicionales.
Bajo el enfoque de NewLaw, no solo enseñamos, formamos e ilustramos, sino que también demostramos cómo las herramientas tecnológicas pueden tener un impacto significativo en el ejercicio del derecho. Los futuros abogados necesitarán habilidades técnicas, como la comprensión de la inteligencia artificial y la capacidad para operar en entornos digitales, aspectos que ya se trabajan en los másteres del área jurídica de la Universidad Loyola. Además, la automatización antes mencionada dará luegar a nuevos puestos de trabajo relacionados con la gestión de la tecnología y la supervisión de procesos automatizados.
NewLaw representa una revolución en la forma de prestar servicios legales. La combinación de tecnología, flexibilidad y un enfoque centrado en el cliente está impulsando una transformación que afecta tanto a los abogados como a los clientes y la regulación del sector. Este nuevo paradigma no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también democratiza el acceso a la justicia, redefine el rol del abogado y plantea nuevos desafíos regulatorios. Con la evolución constante de la tecnología, el modelo de NewLaw seguirá desarrollándose y desafiando el statu quo de la profesión jurídica.
Os recomendamos que no dejéis de actualizaros en las últimas tendencias y adquiráis los conocimientos adecuados sobre NewLaw. Os invito a que miréis detenidamente los másteres del área jurídica de la Universidad Loyola.