El frío amenaza a más de 700.000 niños en el este de Ucrania este invierno
UNICEF advierte de que las vidas de unos 700.000 niños y de la población en general están en riesgo si no se repara de manera urgente la red de agua en las regiones afectadas por el conflicto en Ucrania.
Los sistemas de calefacción centrales en las provincias
orientales de Donetsk y Luhansk dependen del agua, pero el
conflicto ha dañado las tuberías y la infraestructura, y los
escombros de los puentes que han sido destruidos están impidiendo
el flujo del agua. Esto incrementa las posibilidades de
congelación, que podrían llevar a una parada del sistema que
afectaría al suministro de agua, calefacción y electricidad,
dejando a los niños y adultos sin calefacción en unas condiciones
de frío extremo.
“Tenemos que hacer todo lo que podamos para proteger a los niños
más vulnerables durante los meses de invierno,” dijo Giovanna
Barberis, representante de UNICEF en Ucrania. “Esto significa que
debemos garantizar el acceso humanitario a las zonas donde las
infraestructuras están dañadas y repararlas. Es inimaginable pensar
ni siquiera en una sola familia sin calefacción en esta época del
año”, añadió.
Hay un precedente de fallo en los sistemas centrales de
calefacción en Ucrania. En 2006, en el pueblo de Alchevsk, en la
provincia de Luhansk, el equipo se congeló y se rompió. Hubo que
evacuar a la mayoría de sus 120.000 habitantes.
“La realidad es que necesitamos reparar inmediatamente las
infraestructuras de agua dañadas en Luhansk y Donetsk”, dijo
William Fellows, responsable de la sección de Agua, Saneamiento e
Higiene de UNICEF Ucrania. “No solo porque la vida de las personas,
debido a los daños en la infraestructura, está en peligro por la
falta de agua para beber o para la calefacción, sino también porque
el tiempo y los costes de reiniciar el sistema tras un fallo
podrían ser enormes,” afirmó.
El personal de las autoridades competentes sobre el agua y de
las organizaciones humanitarias ya está arriesgando su vida
para mantener el suministro de agua. La presencia de minas, restos
de explosivos de la guerra y municiones no explotadas dificultan
los esfuerzos para realizar las reparaciones de forma segura.
Todavía hay restricciones en el acceso a las áreas no
controladas por el gobierno, establecidas por las autoridades de
facto en la provincia de Donetsk. Además, el corte de los servicios
sociales y beneficios por parte del gobierno de Ucrania a los
habitantes de esas zonas afectará negativamente a las familias y su
uso de los servicios.
Si los sistemas centrales de calefacción fallan, la opción sería
calefactores eléctricos y estufas de carbón. Sin embargo, si
cientos de miles de personas dependen de electricidad adicional se
añadiría más presión al sistema en un momento en el que la
generación de electricidad ya estaría afectada por las limitaciones
de agua, por lo que podría producirse una sobrecarga. Escuelas,
guarderías, residencias de ancianos y centros médicos podrían
también tener graves problemas para continuar operando.
UNICEF hace un llamamiento para garantizar el acceso humanitario
seguro a las áreas no controladas por el gobierno en Ucrania
oriental y proporcionar suministros vitales a los niños, eliminar
la munición no explotada y reparar de manera urgente la
infraestructura para que los sistemas de suministro de agua,
alcantarillado y calefacción sigan funcionando.
Materiales audiovisuales disponibles
en: http://uni.cf/1PEo71b