UNICEF celebra la declaración del fin del brote de ébola en Guinea
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia sigue trabajando en el país para mitigar el impacto que ha tenido en los niños
Casi dos años desde del día en que un bebé se convirtió en la primera víctima de ébola en África Occidental, UNICEF celebra la declaración de que el brote ha terminado en Guinea, pero advirtió que los miles de niños que han quedado huérfanos por la enfermedad, así como aquellos que sobrevivieron, necesitarán apoyo continuo.
«Mientras celebramos esta ocasión, todos debemos recordar que
los niños se vieron gravemente afectados por el ébola. Ellos eran
más propensos a morir si se infectaban. Más de 22.000 niños
perdieron a uno o ambos progenitores en Guinea, Liberia y Sierra
Leona. Están traumatizados y continúan siendo estigmatizados en sus
vecindarios. Para miles de niñas y niños el brote no termina hoy.
Seguirá con ellos durante toda su vida. Comprometámonos a estar con
ellos también», dijo el doctor Mohamed Ag Ayoya, Representante de
UNICEF en Guinea.
Guinea fue declarado libre de transmisión hoy por la
Organización Mundial de la Salud y por el Gobierno, después de no
haber tenido ningún caso durante 42 días – el doble del período
máximo de incubación-. Sierra Leona alcanzó ese hito en noviembre y
se espera que Liberia sigas sus huellas a mediados de enero.
Solo en Guinea murieron de ébola 519 niños, 6.220 niños
perdieron a uno o ambos progenitores o cuidadores y 230
sobrevivieron a la infección.
UNICEF ha estado actuando desde el inicio del brote,
proporcionando suministros necesarios, enviando movilizadores
sociales a informar sobre prevención a las comunidades,
proporcionando agua y saneamiento, apoyando a los huérfanos y otros
niños afectados, y asegurando que todos los niños pudieran
continuar su educación.
La experiencia en los tres países más afectados ha demostrado
que, con la preparación adecuada, los niños pueden ir a la escuela
incluso durante una epidemia.
El brote demostró lo importante que es que las comunidades estén
en el corazón de cualquier respuesta de emergencia. UNICEF y sus
aliados han trabajado para establecer redes de base comunitarias
para asegurar que las propias personas fueran tomando la iniciativa
en la respuesta.
En Guinea no había medios de comunicación masivos para
transmitir mensajes que salvan vidas a todas las personas en más de
20 idiomas y dialectos. En este vacío, los rumores y el miedo se
propagan fácilmente. Para solucionar esto, UNICEF construyó seis
nuevas estaciones de radio comunitarias y rehabilitó otras 23
existentes. Estas estaciones de radio siguen emitiendo en los
idiomas locales e involucrando a las comunidades con los clubes de
radio y programas con llamadas del público. En Forecariah, el área
donde el ébola estaba profundamente arraigado, la radio y sus
programas de difusión fueron un factor importante para poner fin a
la epidemia.
«Los sistemas de salud débiles exacerbaron el brote en los tres
países. Y, hoy en día, el sistema en Guinea es aún más débil», dijo
Ayoya. Uno de los principales retos a partir de ahora será
reconstruir y fortalecer estos sistemas de salud que fueron
profundamente afectados por el ébola. En Guinea las vacunaciones
para niños menores de un año cayó un 30 por ciento, las
hospitalizaciones disminuyeron un 54 por ciento y los partos
asistidos por un profesional se redujeron en un 11 por ciento entre
enero y agosto de 2014, según el Gobierno.
«Con el generoso apoyo de nuestros donantes, UNICEF y nuestros
aliados seguiremos con la reconstrucción del sistema de salud. El
largo camino que tenemos por delante requiere un sostenido y
robusto seguimiento para asegurarnos de que el ébola no encuentre
ningún refugio seguro aquí», dijo Ayoya.