Haití: la falta de combustible debido a la inseguridad amenaza la vida de los recién nacidos en los hospitales
Unos 300 niños, 45 mujeres y 150 pacientes con COVID-19 están en peligro en los centros de salud
Material audiovisual disponible AQUÍ.
PUERTO PRÍNCIPE, 25 de octubre de 2021 – Cientos de mujeres y niños y niñas que buscan ayuda de emergencia en los centros de salud corren el riesgo de morir si no se encuentran soluciones a la escasez de combustible que prevalece en Haití desde hace semanas debido a la inseguridad, según advirtió hoy UNICEF.
Varios hospitales de todo el país han enviado mensajes de SOS directamente a UNICEF y sus aliados, y a través de los medios de comunicación y las redes sociales, ya que carecen de combustible para alimentar sus generadores de energía y permitir que sus departamentos de emergencia respondan de manera eficiente.
“Con la inseguridad que prevalece en Puerto Príncipe, las vidas de muchas mujeres embarazadas y recién nacidos están en peligro porque los hospitales que deberían prestarles cuidados que salvan vidas no pueden operar normalmente debido a la falta de combustible. Corren el riesgo de morir si los servicios de salud no pueden ofrecerles la atención adecuada”, ha señalado el representante adjunto de UNICEF en Haití, Raoul de Torcy.
En Haití, la red eléctrica nacional no es muy fiable y la electricidad es escasa en muchas zonas del país. Los cortes de energía son frecuentes y prolongados, y la mayoría de los hospitales dependen de generadores que funcionan con combustible para mantener con vida a los pacientes, especialmente a los niños, las niñas y las mujeres embarazadas.
Las vidas de 300 niños y niñas, 45 mujeres en maternidad y otros 70 adultos, incluidos los pacientes con COVID-19, están en peligro ya que dos hospitales importantes de la capital haitiana pueden dejar de dar atención en 72 horas si no reciben combustible de inmediato, según informaron este fin de semana medios de comunicación locales.
Como solución temporal y de emergencia, UNICEF ha conseguido un contrato con un proveedor local para suministrar a los hospitales del área metropolitana de Puerto Príncipe unos 10.000 galones de combustible, es decir 37.850 litros. Pero debido a la inseguridad, el proveedor finalmente dijo que no podia transportar combustible en la capital haitiana u otras provincias, incluido el suroeste de Haití, donde 12.200 personas aún necesitan atención después de las heridas que sufrieron por el terremoto del pasado 14 de agosto.
Aunque hay combustible disponible en Puerto Príncipe, transportarlo por todo el país se ha hecho más difícil porque muchos conductores de camiones no quieren transitar por las carreteras que cruzan áreas controladas por pandillas, ante el temor a que ellos y sus camiones sean secuestrados.
“Ningún niño debería morir por un corte de energía. Es frustrante ver cómo los mayores riesgos de secuestro y saqueo en Haití están amenazando la vida de los recién nacidos y las madres, solo porque el combustible tan necesario no se puede entregar a los hospitales en el terreno en medio de una creciente inseguridad», añadió De Torcy.
Más de 150 pacientes hospitalizados con COVID-19 que necesitan atención de emergencia están particularmente en riesgo porque, sin combustible que haga funcionar a los generadores de energía, no pueden recibir oxígeno en hospitales que no están equipados con paneles solares. Se ha informado de 23.619 casos de COVID-19 y 662 muertes en Haití a 19 de octubre.
UNICEF apoya al Ministerio de Salud proporcionando a los hospitales combustible y oxígeno cuando es necesario y ha instalado más de 900 frigoríficos solares en instituciones sanitarias para mantener las vacunas a temperaturas adecuadas. Pero los paneles solares instalados no pueden dar soporte a todos los departamentos de emergencia de los hospitales.
La inseguridad y la crisis de combustible también han afectado a las operaciones humanitarias, ya que el transporte de suministros de emergencia se ha vuelto más caro y el tiempo de entrega, mucho más largo. La agencia haitiana de agua potable e higiene (DINEPA) no puede operar su capacidad de bombeo a un nivel óptimo, lo que ha reducido el suministro de agua en los hogares, escuelas e instituciones sanitarias.
UNICEF insta a todos los actores implicados a que se abstengan de utilizar la violencia para extender la inseguridad y el miedo, y poner en peligro la vida de las mujeres y los niños y niñas, incluidos los que buscan atención sanitaria. Además, pide al Gobierno haitiano que tome medidas para restablecer la seguridad y permitir el acceso a los servicios básicos sin restricciones.
Acerca de UNICEF
UNICEF trabaja en algunos de los lugares más difíciles para llegar a los niños y niñas más desfavorecidos del mundo. En 190 países y territorios, trabajamos para cada niño, en todas partes, cada día, para construir un mundo mejor para todos.
Para más información:
Ildefonso González
UNICEF España, Tel: 608 51 76 05
E-mail: comunicacion@unicef.es