UNICEF y sus aliados responden a la crisis de Líbano e Israel

La crisis de Líbano e Israel está entrando en su segunda semana. UNICEF está seriamente preocupado por los civiles atrapados en el conflicto y se apresura por distribuir suministros de emergencia a decenas de miles de niños y niñas afectados por las hostilidades. Pero mientras continúen los bombardeos israelíes al Líbano y los ataques con misiles de Hezbollah sobre Israel, alcanzar a quienes necesitan ayuda será un enorme desafío humanitario

“Lo primero de todo es que
necesitamos tener un pasillo de seguridad para permitir que los
suministros lleguen a quienes están accesibles”, afirma el
Representante de UNICEF en el Líbano, Roberto Laurenti, al
referirse a los miles de civiles que han huido de sus hogares. Otro
desafío principal según el representante de UNICEF es proveer de
ayuda de emergencia a las “personas que están
atrapadas en sus poblaciones porque han sido
declaradas zonas de guerra”.

Desde que estalló el conflicto la
semana pasada, el Líbano ha ido quedando cada vez más aislado. Los
accesos por tierra, mar y aire están bloqueados, mientras que las
operaciones militares han cerrado el paso entre áreas del sur del
Líbano y el resto del país.

“La crisis tiene el rostro de un niño”

UNICEF también está trabajando para
prevenir la separación de los niños y sus familias y para reunir
rápidamente a aquellos que han sido separados.

Miles de niños están sufriendo la
escalada de violencia, de acuerdo con la Directora Adjunta de
Programas de Emergencia de UNICEF, Afshan Khan. “Definitivamente
esta crisis tiene el rostro de un niño”, afirma. Estamos teniendo
noticias de que existen dificultades para llevar a los niños y
niñas a los hospitales a tiempo de salvar su vida o sus miembros
heridos. Esta es una crisis que marca muy, muy profundamente a
muchos niños”.