Presentación del cuarto informe sobre infancia y SIDA
La presentación del cuarto informe sobre infancia y SIDA elaborado conjuntamente por UNICEF, ONUSIDA y la Organización Mundial de la Salud ha tenido lugar en el Camp Nou y ha contado con la presencia destacada del osito Dubu, protagonista de la campaña que la Fundación Futbol Club Barcelona ha lanzado para dar a conocer el modo en que el SIDA afecta a niños y niñas de todo el mundo
UNICEF ha presentado su informe La infancia y el SIDA: cuarto inventario de situación en el
Camp Nou, invitado por el F.C. Barcelona. Susan Kassede, de la
Sección de SIDA de UNICEF Nueva York, afirmó los datos indican que
se han producido progresos considerables en algunos países tanto en
el tratamiento para evitar la transmisión de madre a hijo como en
la administración de pruebas de detección del VIH a las mujeres
embarazadas. Ejemplificó con países con una alta prevalencia de
SIDA como Botswana, Namibia y Sudáfrica en donde se ha conseguido
una cobertura del tratamiento de madre a hijo de entre el 70 y el
90%.
En todo el mundo, el 45% de las mujeres embarazadas con VIH
están recibiendo en estos momentos tratamiento para evitar que
transmitan el virus a sus hijos, pero todavía queda mucho por
hacer. En la actualidad, solamente al 10% de las mujeres de Nigeria
se les aplica la prueba de detección del VIH y el 90% de las
mujeres embarazadas con VIH no tienen acceso a tratamientos para
evitar la transmisión de madre a hijo. Marta Segú, Directora de la
Fundación del FC Barcelona afirmó que “el Barça se ha aliado con
UNICEF en países como Swazilandia y Malawi en los que el impacto es
visible”. Sin descartar trabajar con UNICEF en Nigeria, matizó que
es un país que por sus dimensiones y problemática no se ha
estudiado.
“Sin la prueba del VIH/SIDA a los niños, perdemos la
oportunidad de salvar cientos de miles de vidas”
La relación entre el VIH, la pobreza en el hogar y la salud de
la madre y el hijo sigue siendo muy marcada. Sin embargo, el éxito
es evidente en los lugares donde los gobiernos se han comprometido
con firmeza para abordar la salud de las madres y de los niños
–especialmente mediante servicios de detección y tratamiento del
VIH– y donde las pruebas y los tratamientos se han incorporado en
los programas generales de salud de las madres y los hijos. Los
progresos podrían ser más firmes si se abordaran las causas
fundamentales de la vulnerabilidad al VIH, como la pobreza, la
desigualdad entre los géneros y la violencia sexual.
En el plano mundial, el tratamiento pediátrico para niños y
niñas con VIH, aunque todavía se encuentra a la zaga del de los
adultos, ha aumentado hasta beneficiar al 38% de quienes lo
necesitan, una mejora de cerca del 40% solamente en un año. Las
últimas pruebas empíricas indican que el diagnóstico durante los
primeros 2 meses de vida y la iniciación temprana del tratamiento
antirretroviral pueden producir reducciones importantes en la
mortalidad infantil, pero los datos revelan que en todo el mundo
solamente el 15% de los niños y niñas nacidos de madres con VIH son
sometidos a la prueba de detección durante los primeros dos meses
después de nacer.
El informe destaca que las inversiones en la prevención y el
tratamiento del VIH y el SIDA están dando resultados, especialmente
entre las mujeres y las niñas. Si se mantienen, y reciben apoyo
mediante el compromiso y unas políticas bien concebidas, los
dividendos se medirán en vidas salvadas.