Escuelas y hospitales, refugios seguros para los niños
UNICEF ha acogido con entusiasmo la aprobación por unanimidad de la Resolución 1998 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que otorga a las escuelas y hospitales carácter de refugios seguros para los niños.
La resolución establece que se debe exigir a
las partes responsables deataques a escuelas yhospitales que rindan cuentas de sus
acciones.
«Los ataques de ese tipo no solo constituyenviolaciones del derecho
internacional y humanitario, sino también
violaciones contra nuestra humanidad común», afirmó Anthony Lake,
Director Ejecutivo de UNICEF. «El Consejo de Seguridad ha dado hoy
un paso muy importante hacia laeliminación de la cultura de la
impunidad y hacia la protección de los niños en las
circunstancias en las que son más vulnerables», añadió.
Identificación de los responsables
La nueva resolución establece que los ataques contra las
escuelas y los hospitales constituyen graves
violaciones de los derechos de la infancia. Asimismo
determina que los responsables de esos actos de violencia deben ser
identificados en el informe anual del Secretario General
sobre los niños y los conflictos
armados.
En ese informe ya figuran los nombres de las partes que cometen
graves violaciones: aquellos que reclutan yemplean menores en los conflictos
armados; los responsables de lasmuertes, heridas olesiones de niños; y los culpables de
actos de violencia sexual contra ellos.
En al menos 31 países de África, Asia,
Europa, América Latina y Oriente Medio, lasescuelas son objeto de graves
amenazas o blanco de violentos ataques por parte de las
fuerzas de seguridad estatales y de los grupos armados no
gubernamentales.
Esas agresiones tienen consecuencias
devastadoras para los niños y sus comunidades, ya que
debilitan los sistemas de educación y atención de la salud y pueden
agravar las privaciones de la población y profundizar las
desigualdades.
La resolución exige que las partes a las que se califique de
infractoras elaboren planes de acción para dar respuesta a esta
situación y pongan fin al reclutamiento de menores y a otras graves
violaciones de sus derechos.
Además de fortalecer el marco jurídico que haga
posible una respuesta más eficaz a esas infracciones, se deberían
hacer mayores esfuerzos por ofrecer a los niñosentornos seguros.
«Esos niños tienen una notable capacidad de recuperación y no
necesitan nuestra compasión», añadió el Director Ejecutivo de
UNICEF. «Lo que necesitan es la protección del derecho
internacional y más apoyo práctico. Por ejemplo, programas que les
ayuden a lograr un desarrollo pleno y a realizar aportaciones
positivas a las sociedades en las que viven».