Angola: el agua potable cambia a una comunidad

Nueve años después del final de una guerra civil de 27 años, Angola lucha por alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio, incluido el objetivo de reducir a la mitad el número de personas sin acceso a agua potable o saneamiento.

Sólo la mitad de los angoleños tienen acceso a fuentes
mejoradas de agua potable
y en las zonas rurales
esta cifra se reduce al 38%
. En el municipio de Matala,
ubicado en la provincia de Huíla, se ha puesto en
marcha el Proyecto Kaplango, lanzado conjuntamente
entre la Unión Europea y UNICEF, que ha logradollevar agua a 2.000 viviendas.

La vida de los residentes ha cambiado radicalmente, tal y como
explica José Vital, que dirige un comité de agua que presta
servicio a 68 hogares en la comunidad agrícola de Alges.

Reducción de enfermedades

«Las tasas de diarrea y de cólera se han
reducido muchísimo en comparación a los tiempos en que el
punto de agua potable más cercana estaba en un río a 5 kilómetros
de distancia
«, dijo. «Como el agua potable estaba tan
lejos, la gente tomaba agua contaminada de arroyos
cercanos. Así es como surgían las enfermedades», añade Vital.

Para el Director Provincial de Agua y Energía de Huíla, Abel da
Costa, el éxito de la asociación UE-UNICEF en el municipio de
Matala ha sido prometedora: «El apoyo que hemos recibido de la UE y
UNICEF ha sido un gran beneficio y esperamos que continúe», dijo da
Costa.

Sin embargo, reconoce que el aumento del acceso al agua
potable se hace más difícil
a medida que su departamento
trata de llegar a más gente, debido a la escasez de
trabajadores cualificados
. No obstante, la
implicación de la comunidad ha sido fundamental
para
lograr el éxito de esta iniciativa.

Alges se erige como una comunidad que destaca por la implicación
de su población en el proyecto, donde colaboraron en la instalación
de un sistema de agua por tuberías. Aunque el
sistema no es perfecto, los miembros del comité local del agua han
estado atentos para mantenerlo en funcionamiento.

Nuevas oportunidades para la población

Beatriz da Encarnação explica cómo tener su propio grifo
ha mejorado rápidamente la salud de sus hijos
, Filipi
Capitango (8 años) y Beomiro Pedro (8 meses).

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«El agua limpia ha supuesto una diferencia notable, sobre todo
cuando se trata de la diarrea. Beomiro Pedro está mucho más sano
que Filipi Capitango cuando tenía su edad», dijo da Encarnação.

Además, disponer de agua en su casa le ha abierto nuevas
oportunidades, como iniciar un negocio: «Ahí es cuando empecé a
hacer helados de la fruta del baobab», dijo. De esta manera, puede
comprar alimentos y ropa para sus hijos, explica.

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