La Alhambra ha encontrado en las nuevas tecnología un firme aliado para seguir revolucionando la visita y reducir el impacto sobre el monumento. Para ello ha echado mano de la inteligencia artificial que ya aplica para analizar el flujo de viajeros y la manera en la que se mueven e interactúan con el monumento. Ahora da una nueva vuelta de tuerca y recabará todos esos datos para estudios científicos que vayan orientados a mejorar esa experiencia del visitante.
Para cumplir este objetivo irá de la mano de la Universidad Pablo de Olavide que tiene en proyecto desplegar un guía basado en inteligencia artificial, a través de la herramienta Davinchi de la empresa sevillana Davinchi Tech, que cumple una doble función: servir de canal para interactuar con el monumento y recabar toda esa información para su análisis posterior. Al frente de este proyecto se encuentran los investigadores de la ‘Cátedra Pepe Cobo Economía del Arte’ de la institución académica.
La alianza se ha materializado con la firma de un convenio a tres bandas entre el Patronato de la Alhambra y el Generalife, la Pablo de Olavide y la empresa tecnológica, que sienta las bases para el desarrollo de esta iniciativa. El punto de partida será el despliegue en todo el conjunto monumental de la aplicación móvil con el objetivo de que los visitantes hagan uso de ella durante la visita. Una vez efectuada la interacción entre el visitante y la aplicación, se recopilarán y analizarán datos de uso e interacción que hasta el momento nunca antes se habían estudiado. Una vez recopilada la información, los investigadores realizarán los informes finales.
La herramienta Davinci es la primera aplicación móvil que incluye tanto los contenidos como los puntos de visita del Conjunto Monumental de la Alhambra, que gestiona la Consejería de Cultura y Deporte. Todo ello con un guía personal dotado de Inteligencia Artificial al que los visitantes pueden preguntar cuestiones de toda índole, tanto por voz como por texto, durante el recorrido y en tiempo real. El contenido que se transmite es adaptado según el perfil del visitante y de sus gustos, preferencias o edad, lo que hace de esta aplicación una herramienta muy atractiva para los viajeros.
Esta no es la única experiencia con herramientas de inteligencia artificial del recinto granadino. Desde principios de año el Patronato trabaja con la Universidad de Granada en la iniciativa ‘Alhambra Living Labs’ para diseñar nuevas formas de visita que reduzcan el impacto sobre el monumento. Con ello se pretende reformular la cifra máxima de visitantes que puede acoger en un determinado espacio de tiempo, pues actualmente los datos de los que se disponen no están tan actualizados.
Para ello es fundamental conocer a fondo cómo es la experiencia de la visita, de qué forma interactúan los viajeros cuando acceden al recinto, cuáles son sus motivaciones y cómo perfeccionarla. La protección de este bien patrimonial es la primera preocupación del Patronato, pero también considera una prioridad abrirla más al público, que el conjunto palatino sea accesible a todos los colectivos con los nuevos espacios ya adaptados, como las Torres Bermejas, recientemente incluidas en el recorrido o la creación de itinerarios temáticos que ofrezcan distintas versiones de un enclave con más de ocho siglos de historia.
La información que arrojan las herramientas digitales que se van a incluir en la visita será procesada por investigadores para garantizar todo el rigor científico. Por tanto, las decisiones que se tomen a raíz de esos informes tendrán una base sólida. Ese es el gran valor de la alianza con las universidades