El consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramón Fernández-Pacheco, ha aprovechado su intervención en el Parlamento de Andalucía para insistir en la necesidad de que Bruselas continúe con las negociaciones con Estados Unidos y se alcance “un acuerdo equilibrado y justo que favorezca a todas las partes y ponga fin a tanta incertidumbre”. Al hilo de esta cuestión, Fernández-Pacheco ha recordado los nuevos aranceles del 10% a productos agroalimentarios europeos que, si no se remedia, subirán al 20% cuando concluya la moratoria de 90 días concedida por Donald Trump el pasado 9 de abril. “Es un asunto complejo con un escenario incierto y muy volátil”, ha comentado el consejero, afirmando que “el Gobierno andaluz comparte la preocupación del sector agroalimentario ante los nuevos aranceles e irá de la mano con él para apoyarle en todo lo que sea posible”.
En su discurso, el representante del Ejecutivo regional ha apuntado que los productores andaluces vienen sufriendo la política arancelaria norteamericana desde hace años, ya que en 2018 se implantó un impuesto a las aceitunas negras que aún continúa vigente. “Estos aranceles ilegales, como los dictaminó la Organización Mundial del Comercio han supuesto pérdidas millonarias para el sector de la aceituna de mesa y una importante reducción de la cuota de mercado en Estados Unidos a favor de terceros países”, ha lamentado Fernández-Pacheco en relación a los impuestos establecidos anteriormente por una política arancelaria estadounidense que ha calificado de “arbitraria”. Al respecto, ha apuntado que “es imprescindible que el Gobierno de España y la Unión Europea sigan con todas las gestiones diplomáticas y políticas necesarias encaminadas a la retirada efectiva de unos aranceles que no se ajustan a la legalidad internacional”.
Además de estos impuestos, el aceite de oliva envasado tuvo también que hacer frente a un gravamen del 25% durante la primera administración Trump.
Medidas andaluzas
En cuanto a la posición de la Junta, el consejero ha remarcado que Andalucía “se prepara lo mejor posible, adoptando medidas para anticiparse y minimizar, dentro de nuestras posibilidades, las implicaciones de cada anuncio y medida que afecta a los sectores productivos andaluces”. Fernández-Pacheco ha explicado que los aranceles aumentan los costes de producción y, por esta razón, defiende que son necesarias iniciativas de carácter fiscal, que buscan abaratar la factura; y otras que persiguen reducir los costes a través de la modernización.
En el caso concreto de medidas impulsadas por la Consejería de Agricultura, su titular ha remarcado que la comunidad autónoma cuenta ya con la primera Estrategia Andaluza para el Sector del Olivar Horizonte 2027, “que actúa como instrumento de apoyo constante al sector; y ha recordado que casi se ha duplicado el presupuesto inicial de la última convocatoria de ayudas para la mejora de la productividad y competitividad del sector del olivar hasta alcanzar los 37,8 millones de euros. “Además, en el segundo semestre de 2025 saldrá una nueva convocatoria dirigida a modernizar las empresas agroalimentarias andaluzas”, ha anunciado el consejero, detallando que los 88 millones de euros de su presupuesto se repartirán entre pymes (66 millones de euros) y grandes firmas (22 millones de euros) del sector.
Asimismo, el consejero ha puesto en valor “el ambicioso paquete de apoyo del Gobierno andaluz al tejido empresarial afectado por las medidas arancelarias de Estados Unidos”, que asciende a 2.875 millones de euros y contempla cuatro líneas principales de actuación. Entre ellas se encuentra ofrecer apoyo económico y financiero a las firmas andaluzas a través, por ejemplo, de incentivos gestionados por Andalucía Trade o de la firma de un protocolo entre la Junta y las principales entidades financieras de la región. Otros ejes de este paquete de respaldo se centran en la puesta en marcha de actuaciones encaminadas a buscar mercados y reforzar acciones comerciales; y en fortalecer el posicionamiento internacional de las empresas andaluzas potenciando la coordinación con el ICEX, dependiente del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa. Por último, la Junta buscará también la colaboración de la Confederación de Empresarios de Andalucía, las Cámaras de Comercio y las asociaciones para llevar a cabo una monitorización de los sectores y empresas más afectados por los impuestos.
Mercado norteamericano
Las exportaciones agroalimentarias andaluzas a Estados Unidos ascendieron a 1.355 millones de euros en 2024, cantidad que supone el 43% de todas las ventas de la región a este país. La importancia de este mercado queda patente en el ranking de los destinos internacionales de los alimentos y bebidas de Andalucía, donde EEUU ocupaba la quinta plaza el año pasado.
Precisamente, el aceite de oliva fue el producto andaluz más exportado en 2024 a Estados Unidos. En concreto, se comercializaron en el mercado norteamericano casi 59.700 toneladas que alcanzaron los 860 millones de euros, concentrando cerca del 19% del valor total de las ventas de aceite de oliva andaluz en el extranjero. En este sentido, el consejero ha querido trasladar un mensaje de tranquilidad al sector andaluz, al tratarse de “un mercado maduro y con gran capacidad adquisitiva”. Por esta razón todo apunta a que, a pesar de los nuevos aranceles, seguirá apostando por los productos de Andalucía.
En el segundo puesto se encuentran las aceitunas, cuyas exportaciones a EEUU alcanzaron los 164 millones de euros en 2024. Entre otros alimentos que Andalucía ha comercializado en el mercado norteamericano en 2024 se encuentran también productos a base de arroz por valor de 34,7 millones de euros; pulpo congelado por 31,7 millones de euros; aceites de girasol, cártamo o algodón por 24,2 millones de euros; y hortalizas por 20,2 millones de euros. En el ámbito de las bebidas destaca el vino, con exportaciones valoradas en 14,7 millones de euros durante el pasado año.