- La vicepresidenta afirma que la recuperación del edificio “ha supuesto un arduo trabajo”, con actuaciones de desescombro y retirada de enseres, labores de limpieza y de salubridad, extracción agua y lodo y reparaciones
- Tras los trabajos de acondicionamiento debido a la dana, acceden las primeras familias al edificio de la Torre A
La vicepresidenta primera y consellera de Bienestar Social, Igualdad y Vivienda, Susana Camarero, ha mostrado su satisfacción por “el avance de los trabajos de recuperación del edificio de La Torre de la Generalitat, que ya permite acoger a 70 familias afectadas por la riada que perdieron su hogar”.
Según ha explicado la vicepresidenta, una vez finalizadas las obras en la Torre A, ubicada en la calle Remigio Soler Tomás, número 1, se han entregado las primeras cinco viviendas de esta parte de la edificación. Dos de estos realojos corresponden a residentes mayores de 60 años procedentes del grupo de vivienda pública de Picanya, que quedó inhabitable. Asimismo, en los próximos días accederán seis familias más a esta misma torre, lo que sumarán 11.
Nada más acabar las obras de este edificio de 184 viviendas, se produjo la riada del 29 de octubre y todos los bajos, zonas comunes y sótanos quedaron afectados. Desde el primer momento, la Vicepresidencia Primera y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, a través de la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (EVha), comenzó el acondicionamiento del edificio en varias fases. Estos trabajos de reacondicionamiento han supuesto una inversión de más de 2 millones de euros.
En una primera fase, el pasado diciembre se logró acondicionar la Torre D (calle Remigio Soler Tomás, número 7). En ella se realojaron 21 familias procedentes de municipios como Aldaia, Alfafar, Catarroja, Massanassa, Picanya y Torrent. Después, una vez han ido avanzado los trabajos de reparación de las distintas zonas, se han ido entregando más viviendas, hasta alcanzar ahora las 70.
La vicepresidenta ha manifestado que la recuperación de este edificio “ha supuesto un arduo y costoso trabajo”, con actuaciones de desescombro y retirada de enseres, labores de limpieza y de salubridad de zonas comunes, extracción agua y lodo del sótano y reparación de elementos comunes e instalaciones.
“Desde el primer momento nos pusimos a trabajar para hacer habitable este edificio, pero los daños eran de tal magnitud que decidimos hacerlo por fases y así poder habilitarlo, paso a paso, para poner a disposición las viviendas a la mayor celeridad posible”, ha señalado Camarero.
Para dar respuesta a las emergencias habitacionales resultantes de la dana, la Generalitat ha ofrecido viviendas del parque público a 248 familias, 139 de ellas han accedido a esta solución y las restantes no les ha resultado necesaria esta opción. Además de estas viviendas de La Torre, se han asignado inmuebles en otras localidades de la provincia de Valencia donde la Generalitat dispone de viviendas.
Viviendas equipadas
Todas estas viviendas se entregan totalmente equipadas y se adjudican por un periodo de seis meses sin coste alguno. Una vez pasado ese plazo, se reevaluará la situación de la unidad de convivencia y, en caso de seguir necesitando el piso, se ampliará el periodo seis meses más. Además, las personas afectadas y que cumplen con los requisitos para acceder a vivienda social y que no hayan podido recuperar su vivienda, podrán continuar en estas casas pagando un alquiler asequible.
La vicepresidenta ha agradecido la colaboración de varias empresas que han donado parte del mobiliario y el acondicionamiento de los inmuebles.
Cabe recordar que, inicialmente, estas 184 viviendas se iban a destinar a alquiler asequible en un proceso de adjudicación que iba a comenzar a mediados de noviembre y en el que la mitad de los inmuebles se cederían a jóvenes menores de 35 años. Sin embargo, la situación de emergencia provocada por las inundaciones obligó a priorizar a las personas afectadas, atendiendo así las urgencias habitacionales de muchas familias que perdieron su hogar.
Los criterios de adjudicación para acceder a una de estas viviendas son: ser residente de zona afectada por las inundaciones y que la vivienda siniestrada constituyese la residencia habitual; carecer de otra vivienda; ostentar la condición física de propietaria, usufructuaria o arrendataria de la vivienda siniestrada; que se haya perdido la vivienda o ésta necesite una reparación de carácter estructural o cuyo periodo de recuperación exceda de seis meses; y no superar ingresos de 4,5 veces el IPREM, referido a 12 pagas.
Características
Las viviendas de La Torre tienen una superficie que oscila entre los 48 metros cuadrados y los 89, con uno, dos y tres dormitorios, ocho de ellas son adaptadas. Además, cada piso está dotado de una terraza cubierta que funciona como una estancia más.
El edificio consta de dos volúmenes, uno de 21 plantas y otro de 15 sobre un zócalo de cuatro. En la cuarta planta, sobre el cuerpo central, hay una terraza accesible como entorno colectivo para los residentes y un local comunitario, a los que se puede acceder desde los cuatro zaguanes.
Se trata de una actuación promovida por la Generalitat que se acoge a los fondos europeos. Del total de la inversión, cercana a los 23.500.000 euros, aproximadamente 8,5 millones corresponden a los Next Generation y los 15 millones restantes a la Generalitat.