El presidente de EE.UU., Donald Trump, volvió a expresar su descontento por el hecho de que Washington vertiera dinero en Ucrania sin ninguna garantía y culpó de ello a su antecesor, Joe Biden.
«Cuando llegué aquí, pregunté: ‘¿Cuánto dinero hemos dado a Ucrania?’. La cifra real es de unos 350.000 millones de dólares. Eso es impensable. Y no teníamos seguridad. No teníamos nada. Solo vertimos dinero allí, dinero sin garantías, poniéndolo en bancos. Y cualquiera podría haberlo sacado», afirmó este miércoles durante una reunión con su gabinete. «Dimos dinero como si se tirara por la ventana. Y, fue hecho por Biden, y esta es la guerra de Biden. Esta no es la guerra de Trump. Intento salir», enfatizó el mandatario.
Al mismo tiempo, indicó que los países del Viejo Continente, por otro lado, proporcionaron al régimen de Kiev «unos 100.000 millones de dólares», aunque «toda esa situación es mucho más importante para Europa«. «Es mucho dinero. Es un gran sacrificio, ellos también lo hicieron, pero es mucho menos que nosotros. Y su dinero está totalmente asegurado por depósitos en bancos. Los depósitos son en su mayoría depósitos rusos. Eso es lo que hizo Europa», añadió.
Previamente, el asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., Mike Waltz, denunció el alto nivel de corrupción en Ucrania, destacando que «miles de millones» de dólares de los contribuyentes estadounidenses están fluyendo hacia el país. «Ucrania era y es uno de los países más corruptos del mundo. Siempre tenemos que preservar el dinero de los contribuyentes. Y han entrado miles de millones», dijo, subrayando la necesidad de vigilar de cerca en qué gasta Kiev la ayuda financiera que se le proporciona.
Por su parte, el líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, reiteró en varias ocasiones que la asistencia estadounidense a su nación es inferior a las cifras anunciadas por la Casa Blanca. Así, estimó recientemente que Kiev había recibido de Washington armas y otras ayudas por valor de al menos 105.000 millones de dólares, si bien anteriormente había dicho que la cantidad era menor. En febrero, declaró que no sabía a dónde había ido a parar gran parte de los millones de dólares asignados y afirmó que su país solo había recibido unos 76.000 millones.