El Consejo de Gobierno ha autorizado la tramitación del expediente para la contratación de las obras de mejora de la eficiencia, optimización y reducción de pérdidas en las infraestructuras del Canal del Granado, situado en el sistema Chanza-Piedras, que abastece de agua a la ciudad de Huelva, a las poblaciones de la costa, al polo industrial y a las extensas zonas regables existentes en la zona costera onubense.
El transporte del agua hasta los puntos de consumo se efectúa en dos etapas: la primera (a través del canal del Granado) lleva el agua desde el embalse del Chanza, situado en la frontera con Portugal, hasta el embalse del Piedras, y la segunda (canal del Piedras y Anillo Hídrico) distribuye en ruta a los distintos usuarios.
Las obras autorizadas, que cuentan con un presupuesto de licitación de 8.070.801,53 euros de Fondos Feder y un plazo de ejecución de 12 meses, son necesarias para la mejora de capacidad hídrica del canal del Granado, que requiere una serie de trabajos de rehabilitación y mejora, tanto en la impermeabilización del canal en toda su longitud como en la realización de otras actuaciones concretas en diferentes tramos del canal.
El objetivo de la actuación es mejorar la seguridad y la eficiencia de la explotación, para satisfacer tanto la demanda actual como la futura del Sistema de Explotación de Agua Bruta de la provincia de Huelva. En concreto, esta actuación contempla la rehabilitación y mejora de la impermeabilización de las juntas y los tramos de transición existentes en las infraestructuras que componen el canal (sifones, acueductos, cámara de carga, etc.) con el objetivo de reducir las pérdidas de agua existentes en la actualidad.
También incluyen la mejora de la cimentación existente de los acueductos, la instalación de compuertas en entrada y salida de cada uno de los conductos de los sifones que permitan anular el paso de agua por cualquier conducto sin necesidad de realizar un corte total de funcionamiento del canal, y la rehabilitación y reposición de elementos deteriorados de diversa índole (pasarelas, anclajes, camino de servicio, etc.) a causa del envejecimiento de las estructuras y los efectos de los procesos erosivos.
Estas infraestructuras de transporte y distribución de agua bruta necesitan un mantenimiento constante para asegurar el suministro demandado, siendo sin duda, una arteria vital para la economía de la comarca, al abastecer no sólo a la gran mayoría de la población, sino también a zonas industriales y estratégicas como es la producción agrícola.
En la segunda mitad de la década de 1960 dieron comienzo las obras de la presa y el canal del Piedras, y el bombeo de Bocachanza y el canal del Granado, que es el conjunto primigenio de todo el sistema de transporte. Si bien en los años iniciales la infraestructura construida fue suficiente para satisfacer la demanda, tanto en disponibilidad de recursos como en capacidad de transporte, el incremento del consumo ha obligado a realizar ampliaciones con el paso de los años con objeto de aumentar el potencial de recursos hídricos de cabecera, de dotar de más capacidad a los canales de transporte, y en general, a toda la infraestructura de distribución de agua.