Una veintena de participantes del Programa de Voluntariado Ambiental de la Universidad de Córdoba (UCO) rehabilitó un mirador y un observatorio científico de aves en la Laguna de la Quinta (Baena). Este programa pone su punto final del curso con esta actividad.
La actividad de voluntariado, que contó con la colaboración de la Delegación Territorial de la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, consistió en el traslado hasta la Laguna de la Quinta, en Baena, para la rehabilitación de un mirador y un observatorio científico de aves que se construyeron hace años gracias a la iniciativa de Groden-Ecologistas en Acción de Baena y al Ayuntamiento de esta localidad y tenían algunos desperfectos. Allí, Juan de la Cruz, Director-Conservador de las Reservas Naturales del Sur de Córdoba, hizo una introducción a la importancia de este ecosistema. Esta laguna es el humedal de mayor entidad y el más significativo por sus valores ambientales del municipio de Baena y fue declarado Reserva Ecológica por la Junta de Andalucía el 13 de junio de 2013, recogido en la Ley 8/2003 de Flora y Fauna Silvestres de Andalucía. El buen hacer y disposición de los propietarios de los terrenos ha servido para que este espacio natural llegue hasta nuestros días en un estado de aceptable conservación.
Los participantes pudieron, además, dedicar un tiempo a la observación de aves tan interesantes como el flamenco común (“Phoenicopterus roseuso”), el somormujo lavanco (“Podiceps cristatus”), el aguilucho lagunero occidental (“Circus aeruginosus”) o la cigüeñuela común (“Himantopus himantopus”), entre otras. La actividad se trasladó hasta Villafranca para comer y seguir observando aves en el río Guadalquivir antes de su finalización en Córdoba capital.
Con esta actividad finaliza el Programa de Voluntariado Ambiental de este curso. Este programa está organizado por el Servicio de Protección Ambiental del Vicerrectorado de Campus Sostenible, a través de su Aula de Sostenibilidad. Durante este curso se han realizado 14 actividades diferentes, a las que se han sumado más de 200 participantes y en las que se han realizado acciones tan diversas e interesantes como la naturalización de estanques, la construcción de refugios de anfibios, la revisión de las cajas nido del Campus de Rabanales o la mejora de construcciones en espacios naturales protegidos, como las de piedra seca en el Parque Natural y Geoparque de las Sierras Subbéticas o esta última en la Laguna de La Quinta.