La liberación de la provincia de Kursk y la expulsión de los combatientes ucranianos está entrando en su fase final: todo el territorio será limpiado en un futuro próximo, declaró a TASS el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Serguéi Shoigú.
«En el marco de la operación antiterrorista, se está completando la retirada de militares enemigos de la provincia de Kursk. La brillante realización de la operación ‘Flujo’, utilizando un tramo del estratégico gasoducto Urengoy-Pomary-Uzhgorod, ya ha entrado en la historia de la ciencia militar. Según las estimaciones del mando militar, en un futuro ya próximo todo el territorio de la provincia de Kursk estará despejado», dijo.
Ya antes, el jefe del Estado Mayor General de las FF.AA. y primer viceministro de Defensa, Valeri Guerásimov, había confirmado que el Ejército ruso ha expulsado a los combatientes del régimen de Kiev de la mayor parte de la provincia de Kursk.
«La mayor parte del territorio de la provincia donde se produjo la invasión [por parte de las tropas ucranianas] ha sido liberada. Esto significa 1.260 kilómetros cuadrados, el 99,5 %«, comunicó.
Este miércoles, el Ministerio de Defensa informó que las bajas del enemigo durante el día ascendieron a más de 170 efectivos. De igual forma, fueron destruidos un vehículo de combate de infantería Bradley, de fabricación estadounidense, un vehículo blindado de combate, dos morteros, 11 puntos de control de vehículos aéreos no tripulados y dos depósitos de municiones.