Las sociedades democráticas contemporáneas enfrentan un reto crucial: adaptar sus estrategias de lucha contra el terrorismo sin comprometer los derechos fundamentales que las definen. Esta es una de las principales conclusiones que se extraen del libro «Terrorismo y Sociedad Democrática: principales debates de actualidad», una obra coordinada por Daniel Sansó-Rubert Pascual y R. Rebeca Cordero Verdugo, que aborda desde una perspectiva multidisciplinar los desafíos del extremismo violento en el siglo XXI.
El terrorismo ha evolucionado en la era digital, aprovechando las nuevas tecnologías para expandir su impacto a nivel global. La desinformación y la manipulación informativa se han convertido en armas tan poderosas como los atentados físicos, socavando la confianza en las instituciones democráticas y polarizando a las sociedades. En este escenario, los autores subrayan la necesidad de actualizar las estrategias de prevención y respuesta al terrorismo, con un enfoque que combine la seguridad con la garantía de derechos y libertades.
Uno de los puntos más relevantes de la obra es el papel fundamental de la juventud en la prevención del extremismo. La educación en valores democráticos, el pensamiento crítico y la inclusión social se presentan como herramientas clave para reducir la vulnerabilidad ante discursos radicales. La cooperación internacional y el fortalecimiento del Estado de derecho son también elementos esenciales para abordar este fenómeno de manera efectiva y sostenible.
El Instituto Universitario General Gutiérrez Mellado de la UNED fue el escenario en el que se debatió sobre estas cuestiones, en la presentación del libro Terrorismo y Sociedad Democrática: principales debates de actualidad» que convocó a expertos en la materia, así como a representantes institucionales y del ámbito de la criminología y la educación. El análisis puso de manifiesto que la lucha contra el terrorismo en democracias avanzadas debe ir más allá de la respuesta reactiva, apostando por la prevención, la educación y el fortalecimiento de los valores democráticos como mejores estrategias para garantizar la seguridad sin erosionar las libertades individuales.
Los autores destacan la importancia de la verdad, la justicia y la reparación en la construcción de la paz social y la memoria democrática, ofreciendo una visión integral de uno de los mayores desafíos en materia de seguridad y defensa a nivel mundial