Irak: UNICEF vuelve a abrir sus oficinas en Bagdad y pone en marcha un proyecto financiado por la UE para mejorar el acceso al agua y los servicios de saneamiento

UNICEF pone en marcha un proyecto de 10 millones de dólares financiado por la Unión Europea para mejorar los servicios de agua y saneamiento en Irak. El proyecto, implementado por UNICEF en colaboración con el Ministerio de Municipios y Obras Públicas y el Ministerio de Municipios en Kurdistán, pretende mejorar el suministro de servicios que ofrece el Gobierno, reforzando su capacidad para administrar y desarrollar los recursos hídricos de Irak y su sector de agua y saneamiento.

Bagdad/Ginebra,  “Esta inversión beneficiará
a más de 100.000 personas, incluyendo a niños y
niñas de unas 30 escuelas en las localidades de Erbil,
Sulaymaniyah, Muthanna, Thi-Qar, Missan y Basora, que tendrán un
mejor acceso al agua y a las instalaciones sanitarias”, ha
declarado Sikander Khan, Representante de UNICEF en Irak. «El
proyecto representa también un apoyo sustancial a los esfuerzos del
Gobierno por mejorar el suministro de agua y servicios de
saneamiento a millones de personas más. Aspiramos a mejorar la
calidad del agua y la cobertura de saneamiento para todos los niños
y familias iraquíes, con lo que se cumplirá el Objetivo de
Desarrollo del Milenio de reducir a la mitad el número de personas
sin acceso sostenible al agua potable segura en 2015”, ha
añadido.

El sector de agua y saneamiento de
la oficina de UNICEF en Irak no pueden a día de hoy cubrir las
necesidades de la mayoría de la población. Después de muchos años
de una inversión ínfima y un inadecuado mantenimiento debido a la
guerra y a las sanciones, unos seis millones de personas, de las
que 4,5 millones viven en comunidades rurales, no
tienen acceso al agua potable segura. De esta cifra, casi 2,5
millones acceden al agua a través de los ríos, lo que les deja en
una situación de riesgo de enfermedades relacionadas con la calidad
del agua, como la diarrea acuosa aguda, que es la segunda causa de
mortalidad infantil en el país.

A través del proyecto, el próximo
año se formará a cientos de trabajadores del gobierno sobre mejores
prácticas en agua y saneamiento en el mundo; se apoyará la apertura
de un Centro de Capacitación y Conocimiento; se realizará una
encuesta actualizada para identificar las áreas más críticas en las
que es necesario invertir y desarrollar planes de agua y
saneamiento en dos regiones, de forma que puedan ser replicados en
otras zonas para garantizar que en la planificación se contempla el
acceso a servicios de calidad para la mayoría de la población.

Coincidiendo con el desarrollo del
proyecto, después de seis años garantizando su respuesta operativa
desde Amán (Jordania), donde ha permanecido debido a la guerra,
UNICEF Irak está reforzando su presencia en este país con la
llegada de cinco profesionales senior a Bagdad. Esto marca el
principio del regreso de la oficina de UNICEF Irak a ese país en
los próximos meses. “UNICEF ha empezado a trasladarse a Bagdad para
reforzar su apoyo al gobierno para que la situación que ha vivido
el país durante muchos años, que ha menoscabado los derechos de los
niños se solucionen sistemáticamente,” manifestó Khan. “Siendo los
niños y las niñas el recurso más importante para la estabilidad del
futuro de Irak y su prosperidad, a la vez que empieza la
reconstrucción, ahora debemos garantizar que se hagan todos los
esfuerzos e inversiones para mejorar alianzas en todos los aspectos
de la sociedad Iraquí y mejorar la situación de su infancia
equiparándola a la de la infancia en los países desarrollados”.

UNICEF en Irak

UNICEF está en Irak desde 1983
trabajando para garantizar la supervivencia de los niños iraquíes,
y para que puedan alcanzar un desarrollo pleno. UNICEF está
apoyando al Gobierno de Irak en la creación de políticas de
infancia; aumentando la capacidad de sus instituciones, y
movilizando recursos para hacer posible que se cumplan los derechos
de la infancia iraquí. A través de una red de personal y aliados,
los programas de UNICEF continúan mejorando los servicios de salud
primaria, asegurando la calidad de la educación, reconstruyendo los
sistemas de agua y saneamiento, y protegiendo a los niños contra la
violencia y la explotación, y cubriendo las necesidades de las
personas más vulnerables en situaciones de crisis.