UNICEF distribuye ayuda de emergencia a los afectados por el conflicto en República Centroafricana
Ayer llegó a Bangui, la capital de la República Centroafricana devastada por el conflicto, un vuelo especial fletado por UNICEF cargado con más de 23 toneladas de medicamentos esenciales, suministros de obstetricia y tanques de agua, cuando se cumplen dos semanas desde de que fuera tomada por un grupo armado.
Se trata de una de las primeras entregas
importantes de suministros de ayuda humanitaria que llegan a la
República Centroafricana tras los episodios de inseguridad y los
saqueos de hospitales y centros de salud registrados en las últimas
semanas, que han provocado la pérdida de materiales médicos,
equipamiento y mobiliario.
Los equipos médicos de emergencia
distribuidos se utilizarán para tratar a unas 200.000 personas
afectadas por el conflicto durante los próximos tres meses. También
en el vuelo iban doce tanques de agua con equipos de deistribución
para garantizar el suministro de agua en los principales hospitales
y centros de salud de la capital, Bangui, y otras áreas accesibles.
Se han hecho gestiones para garantizar que se distribuyen y se
almacenan con total seguridad.
«Esta entrega representa un paso vital para
que los niños, y la población en general, recuperen el acceso a la
atención médica básica», dijo Souleymane Diabate, Representante de
UNICEF en Bangui. «Sin embargo, esto es sólo la punta del iceberg
en términos de necesidades. Se ha perdido mucho en el saqueo
producido a este país donde los niños se enfrentan a algunas de las
condiciones de supervivencia más difíciles del
mundo».
Desde el golpe de estado del 24 de marzo, UNICEF ha distribuido 81
toneladas de suministros de emergencia, especialmente medicamentos
esenciales y equipos médicos para atender a más de 60.000 personas,
a los aliados de UNICEF que operan en los hospitales y centros de salud.
Este es el segundo avión cargado con
suministros de emergencia fletado por UNICEF en lo que va de año.
El primer vuelo de UNICEF llevó más de 14 toneladas de medicamentos
y suministros esenciales de emergencia a Bangui el 24 de
enero.
Las oficinas, vehículos y almacenes de
UNICEF, otras agencias de Naciones Unidas y numerosas ONG que
operan en el país, fueron saqueadas durante el período de la caída
del gobierno de Bozize y la llegada de la coalición rebelde Seleka
a finales de marzo.
«Los suministros se distribuyen de forma
selectiva a los aliados que trabajan en temas de salud, y que
tienen la capacidad de cuidar y tratar a los más necesitados,
empezando por los principales hospitales y centros de salud»,
agregó Diabate. «El nuevo gobierno ha prometido su cooperación en
estos esfuerzos.»
UNICEF estima que toda la población de la
República Centroafricana, unos 4,6 millones de personas, incluyendo
más de 2,3 millones de niños, se están viendo directamente
afectados por el conflicto debido al colapso de los servicios y de
la ley.
Sólo se ha recibido el 13 por ciento de los
172 millones de dólares (131,89 millones de euros) solicitados por
la comunidad humanitaria para llevar a cabo su trabajo. Se prevé
que las necesidades aumenten a la luz de los acontecimientos
producidos recientemente. UNICEF estima un déficit de financiación
inmediata para satisfacer las urgentes necesidades humanitarias en
los próximos seis meses de más de 11 millones de dólares (8,43
millones de euros).