«EL TRABAJO INFANTIL ES UNO DE LOS PROBLEMAS DE LA INFANCIA EN BRASIL». ENTREVISTA CON PATRICIA SABOYA, SENADORA BRASILEÑA
“Los principales problemas de la infancia en Brasil son el trabajo infantil y la explotación sexual de los niños y adolescentes”
Con estas palabras, la senadora
brasileña Patricia Saboya define la problemática de la infancia en
su país. La senadora estuvo en España para mostrar las propuestas
que desde este país latinoamericano se están haciendo para mejorar
la calidad de vida de millones de niños y niñas.
En Brasil, el 45 por ciento de la
populación vive debajo del límite de la pobreza (familias que
cobran menos de medio salario mínimo para vivir), con el agravante
de que en este margen se encuentran 60 millones de niños y niñas
entre 0 y 17 años. La situación de la infancia y la necesidad de
hacer alianzas que puedan ayudar a mejorarla son los temas que
abandera la senadora Patricia Saboya y que expuso por su paso en el
Comité Español de UNICEF.
¿Cuáles son los problemas que enfrentan los niños y niñas de
Brasil?
Uno de los principales problemas de
la infancia en Brasil son el trabajo infantil y la explotación
sexual de niños y adolescentes, por esto la búsqueda de soluciones
es urgente y para esto estamos intentando hacer alianzas con las
organizaciones que puedan ayudarnos.
Ahora uno de los mayores retos de
Brasil es ofrecer oportunidades a los hombres y las mujeres que
tengan capacidad de trabajar y que actualmente están desempleados.
Cuando los padres no tienen trabajo, los hijos acaban por irse a
las calles y su energía se queda mal canalizada, por ejemplo, hacia
las drogas, la explotación sexual y tantas otras cosas malas que
afectan nuestra sociedad.
¿Qué se ha hecho para mejorar la situación de la infancia?
Yo presidí la Comisión Mixta de
Investigación, creada por el Congreso Nacional brasileño para
investigar las redes de explotación sexual de niños y adolescentes.
Además, hace diez años participé en la creación de un frente
parlamentario para los Derechos de los Niños y Adolescentes.
En este frente no hay partidos, es
la adhesión de parlamentarios, senadores y diputados federales que
están comprometidos con la causa de los niños y adolescentes.
Actualmente, son 200 los parlamentarios de este frente que se
comprometen a defender los Derechos de los Niños y Adolescentes
tanto en el Senado como en la Cámara de los Diputados.
Las principales acciones de esta
instancia son aprobar proyectos de leyes relacionados con los niños
y adolescentes, vigilar que los recursos destinados a estas áreas
sean propiamente utilizados e intentar garantizar la aplicación del
Estatuto de los niños y adolescentes de Brasil.
También es interesante la
innovadora iniciativa de UNICEF en Estado do Ceará, uno de los más
pobres del Nordeste de Brasil, que yo represento. Allí, UNICEF creó
un sello que reciben los municipios que cumplen las metas en
relación a los Derechos de los Niños y Adolescentes y que sirve
para sensibilizar y comprometer los alcaldes con los temas de
protección de la infancia.
Aprovecho esta visita para
reafirmar este compromiso de alianza y pido a Unicef que esta
experiencia sea reproducida en todo Brasil.
Usted también trabaja en pro de los derechos de las
mujeres…
En mi Estado natal Ceará lanzamos
una cartilla que contiene información sobre las leyes existentes
para que sean más accesibles a todas las mujeres, especialmente
aquellas que ni siquiera tienen conciencia de sus derechos.
En Brasil todavía hay
discriminación contra la mujer. Hay sitios en que las mujeres
cobran la mitad del salario de un hombre que ejerce la misma
función, además, gran parte de las mujeres todavía está en el
mercado informal de trabajo y a las empleadas domésticas no se les
respeta sus derechos.
En la política somos muy pocas,
menos de 9 por ciento del total de parlamentarios, pero creo que ya
conseguimos muchas cosas importantes. Conseguimos, por ejemplo,
aprobar una ley según la cual los partidos políticos deben destinar
30 por ciento de las plazas a las mujeres.