LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y SUS MADRES, PROTAGONISTAS DEL DÍA MUNDIAL DE LA SALUD

Bajo el lema «Cada madre y cada niño contarán» se celebra el 7 de abril el Día de la Salud 2005. Su objetivo es movilizar a la sociedad en torno a la importancia que la salud de las madres y los niños y niñas pequeños tienen sobre el desarrollo de las familias y de las sociedades a las que pertenecen

La importancia que la supervivencia
y el bienestar de las madres y de los niños y niñas son en sí
mismos objetivos muy importantes. Pero además son fundamentales
para lograr la solución a muchos problemas económicos, sociales y
de desarrollo de sus comunidades. La repercusionde la muerte o enfermedad de una madre y sus hijos van más allá de
la tragedia humana que supone para su familia. La salud
materno-infantil es un elemento clave para reducir las
desigualdades y la pobreza en el mundo.

De acuerdo con Lee
John-wook, Director ejecutivo de la OMS, «el bienestar de la
sociedad está directamente relacionado con la salud y la
supervivencia de las madres y los niños. Si las madres sobreviven y
prosperan, sus hijos sobrevivirán y se desarrollarán. Del mismo
modo, si las madres y los niños sobreviven y prosperan, las
sociedades en que viven también prosperarán.»

Consecuencias de la mala salud materno infantil

Se estima que todos los
años muere un millón de niños y niñas pequeños a consecuencia de la
muerte de sus madres. (Fuente: OMS)

• La mala salud es una
  de las principales razones por las que las familias se empobrecen y
  permanecen en la pobreza.
• Cuando una madre
  enferma o muere, su aportación productiva al hogar, a la economía y
  a la sociedad se pierde, y la supervivencia y la educación de sus
  hijos se ven amenazadas.
• Por cada euro que se
  invierte en salud infantil, se obtienen siete euros, gracias a la
  reducción del gasto social y a un aumento de la productividad joven
  y adulta, según estimaciones del Banco Mundial.

Existen soluciones, pero no son aplicadas

En la actualidad se
disponen de conocimientos y medios eficaces que pueden aplicarse
incluso en los países o sectores sociales más pobres. Si embargo,
los progresos realizados han sufrido un estancamiento. Por ejemplo,
de acuerdo con la OMS, al ritmo actual, se tardarían más de 150
años en reducir la mortalidad infantil en dos terceras partes (uno
de los Objetivos de desarrollo del Milenio para 2015). Para actuar
efectivamente contra esta situación, es necesario que la comunidad
internacional, los gobiernos, las instituciones de la sociedad
civil e incluso los ciudadanos afronten el
problema, desde diferentes perspectivas. Sólo de este modo
es posible evitar que cada año mueran más de medio millón de madres
por causas relacionadas con el embarazo y el parto y 10,6 millones
de niños y niñas menores de cinco años a causa de enfermedades
prevenibles y tratables.

La «regla de los dos tercios»

• Cada año mueren más de 7 millones de bebés antes de cumplir los
  dos meses de edad.
• Casi dos tercios de estas muertes ocurren durante el primer mes
  de vida.
• Entre aquellos que mueren durante el primer mes de vida,
  aproximadamente dos tercios mueren durante la primera semana de
  vida.
• Entre aquellos que mueren durante la primera semana de vida,
  dos tercios lo hacen durante las primeras 24 horas de vida.