LA SESIÓN ESPECIAL DE LA INFANCIA, TRES AÑOS DESPUÉS

En mayo de 2002, más de 7.000 personas participaron en la conferencia internacional más importante dedicada a la infancia en el último decenio. En ella, países de todo el mundo se comprometieron con una serie de objetivos encaminados a mejorar la situación de los niños, niñas y jóvenes, plasmándolos en el programa «Un mundo apropiado para los niños»

La Sesión Especial de la Infancia
fue la primera cumbre mundial en la que se incluyó a niñas y niños
como delegados oficiales. Su finalidad era analizar los progresos
alcanzados desde la Cumbre Mundial en favor de la Infancia de 1990
y renovar el compromiso internacional en favor de los derechos de
la niñez.

Alrededor de 70 Jefes de Estado y/o
de Gobierno, Primeros o Viceprimeros Ministros y numerosas
delegaciones gubernamentales de alto nivel participaron en la
Sesión. De los 187 países que tomaron la palabra durante el debate
plenario, Noruega, Países Bajos, Suecia y Togo lo hicieron a través
de la voz de sus propios niños, incluyendo a jóvenes representantes
que se dirigieron a la Asamblea General.

Además, la Sesión Especial contó
con la presencia de un gran número de dirigentes de la sociedad
civil, comprendidas las ONG y agrupaciones culturales, académicas,
empresariales y religiosas, y de personalidades destacadas.

¿Es el mundo más apropiado para los niños ahora?

En su discurso inaugural Kofi
Annan, Secretario General de las Naciones Unidas se dirigió a la
infancia, expresando su preocupación: «Nosotros, los adultos, os
hemos defraudado de una manera deplorable. Uno de cada
tres de vosotros sufre desnutrición antes de cumplir cinco años.
Uno de cada cuatro no ha sido vacunado contra ninguna enfermedad.
Casi uno de cada cinco no acude a la escuela … Los adultos debemos
invertir el sentido de esta lista de fracasos».

Planes de acción nacionales

Para asegurar el compromiso
adquirido es fundamental el seguimiento. Los países participantes
han elaborado planes de acción en los que establecen la puesta en
práctica de Declaración y el Plan de Acción de la Cumbre Mundial.
Además, una Plataforma de Acción fue adoptada
durante la Sesión Especial para ayudar a los países en sus
esfuerzos por aplicar la Convención de los Derechos del Niño.

Los planes nacionales deben basarse
en un calendario concreto de objetivos mensurables y deben tener en
cuenta los intereses superiores del niño. Los planes de acción
deben ser consonantes con las legislaciones nacionales y, al mismo
tiempo, deben respetar los derechos humanos y las libertades
fundamentales expuestos en la Convención sobre los Derechos del
Niño.

Seguimiento de la Convención

La Convención sobre los Derechos
del Niño ha sido ratificada por casi todos los países del mundo. Al
hacerlo, esos países se han comprometido a presentar periódicamente
informes al Comité de Derechos del Niño . En esos informes se
describen los avances hacia la concreción de los derechos
establecidos en la Convención. La Oficina del Alto Comisionado de
las Naciones Unidas para los Derechos Humanos publica copias de
esos informes así como los comentarios y sugerencias que realiza el
Comité de Derechos del Niño.

Compromiso con la infancia

Los cambios necesarios
en todo el mundo para proteger los derechos de los niños y las
niñas empiezan con acciones adoptadas por todos y cada uno
nosotros. Todos debemos hacer nuestra parte, desde los gobiernos a
las organizaciones y a las personas, incluyendo a la misma
infancia.

Con este fin existe elMovimiento Mundial en favor de la Infancia, que
contribuye a la realización de los principios de la Declaración y
del Plan de Acción de la Sesión Especial al máximo número de
personas posible, de todos los rincones del planeta.