LA MICROPLANIFICACIÓN MEJORA LAS VIDAS DE LOS NIÑOS Y NIÑAS DE ZONAS RURALES DE LA INDIA
El objetivo fundamental de la microplanificación consiste en lograr que todos los miembros de la comunidad traten de determinar cuáles son los problemas comunes, y que luego se dediquen a su resolución. Como resultado del proceso, los adultos aprenderán cuáles son los derechos de la infancia
Suguna, de 12 años de edad, se
sienta junto a sus compañeros de clase a la sombra de un árbol en
la aldea de Irudalam. El rítmico canturreo de la lectura de los
niños y niñas se combina con la voz del maestro y se eleva sobre
las sencillas viviendas de piedra y barro de esta comunidad
tradicional.
Suguna asiste a un «curso de
recuperación» para mantener al día los conocimientos de los niños y
niñas que han abandonado sus estudios. Así, algún
día podrán reanudar su educación escolar.
Obisilamy, el padre de Suguna, sacó
a la niña de la escuela cuando su madre, Radhamma, tuvo su cuarto
hijo. Debido a que Suguna es la hija mayor, tuvo que hacerse cargo
del cuidado del niño, para que su madre pudiera seguir ganando su
salario diario de 30 rupias (equivalentes a unos 60 céntimos de
euro).
Suguna ha regresado a clases
gracias a un ambicioso proyecto de microplanificación que cuenta
con el respaldo de UNICEF y sus aliados locales. Este plan ha
logrado fomentar un modelo de desarrollo comunitario, especialmente
con respecto a las necesidades de los niños y las niñas.
El objetivo fundamental de la
microplanificación consiste en lograr que todos los miembros de la
comunidad traten de determinar cuáles son los problemas comunes, y
que luego se dediquen a su resolución. Durante un ejercicio
intensivo de cinco días de duración se evalúan todos losindicadores fundamentales referidos a la salud de
la comunidad, y se elabora un plan detallado para mejorar la vida
de los integrantes de la misma. Posteriormente, grupos de
voluntarios comienzan a poner en práctica los cambios contemplados
en el plan.
La microplanificación se concentra en las necesidades de los
niños y niñas
«Como resultado del proceso,
los adultos aprenderán cuáles son los derechos de la
infancia», explica Madhayan, un facilitador que ayuda en la
implementación de la microplanificación sobre el terreno. Madhayan
pertenece a la ONG Myrada, que es una aliada local de UNICEF.
Madhayan agrega que «no basta con suministrar alimentos y
cobijo; los padres deben hacer mucho más que eso por sus
hijos».
De no haber sido por la presión que
ejerció la comunidad local sobre el padre de Suguna, la niña habría
llegado a la edad adulta analfabeta y carente de
toda forma de educación.
«Su maestro me ha dicho que
Suguna rinde bien en la escuela», comenta Obilisamy. «Y
después que me lo pidiera dos o tres veces, finalmente acepté el
que mi hija regresara a clase».
«Me siento feliz de haber
regresado al escuela con mis amigos», nos cuenta Suguna.
Los pequeños logros podrían determinar profundos cambios
Es evidente que la
microplanificación puede mejorar las vidas de los pobladores de las
aldeas de muchas maneras. Pushpa, una voluntaria de 19 años de
edad, se enteró de los beneficios de la lactancia materna durante
un curso de capacitación en microplanificación. Haciendo uso de
esos conocimientos, Pushpa convenció a una madre primeriza de queamamantara de manera exclusiva a su hijo durante
los seis meses posteriores al nacimiento en lugar de incluir leche
de vaca en el régimen alimentario del bebé.
«Me entusiasma el poder
compartir todo lo que he aprendido con los demás aldeanos, de
manera que ellos también puedan beneficiarse y vivir vidas
saludables», detalló Pushpa. «En la aldea han ocurrido
muchos cambios», comenta Vijaya, otra madre, mientras sostiene
a su hijo en brazos.
«Me explicaron la importancia
de amamantar a mi hijo durante los primeros seis meses de vida, y
eso es lo que he hecho. Por eso mi hijo está tan saludable
ahora», agregó Vijaya mientras otra voluntaria, Krishnaveni,
esperaba a su lado para enseñarle a otra madre como determinar si
la sal comestible es yodada.
Se espera que esos pequeños logros
provoquen cambios profundos en las zonas rurales de la India.
Aunque 16 distritos del todo el país participan en este experimento
social, no hay ningún lugar en la India donde la brecha que separa
lo viejo de lo nuevo resulte tan obvia como en Krishnagiri. A
apenas una hora de distancia de las nuevas plantas industriales de
alta tecnología de Bangalor, la vida rural se
desarrolla en un mundo intemporal y distante. Se espera que la
microplanificación pueda al menos mejorar las condiciones de vida
-especialmente las de los niños y niñas- en las aldeas típicas de
la India, que carecen de muchas de las comodidades de las que ya
dispone la población urbana.