Youssou N’Dour pide apoyo para los niños del Cuerno de África

El Embajador de Buena Voluntad de UNICEF Youssou N’Dour, tras reunirse con familias afectadas por la sequía en el Cuerno de África, ha hecho un llamamiento a los líderes mundiales africanos y de otras partes del mundo para encontrar soluciones duraderas a  estas crisis cíclicas.

«Después de mirar a la cara y escuchar la voz de aquellos que
están atrapados en esta tragedia, me parece inaceptable que existan
estas historias de sufrimiento y desesperación en estos tiempos»,
dijo.

«Debe haber un foco indivisible y que no se desvíe sobre lo que
les está sucediendo a los niños aquí en el Cuerno de
África. Cada uno de nosotros tiene un papel que jugar en
la respuesta a las necesidades urgentes de estos niños, y en hacer
lo que sea necesario para evitar que esto vuelva a suceder”.

Visita a los campamentos de Dadaab

N’Dour se reunió ayer con refugiados
somalíes que viven en los campamentos deDadaab, en el noreste de Kenia. A principios de
esta semana, la ONU anunció que el número de personas afectadas por
la hambruna en Somalia se había duplicado, a750.000, desde julio.

Durante su visita a los campamentos de refugiados,N’Dour vio de primera mano eltratamiento de niños condesnutrición severa, los esfuerzos de
inmunización y las escuelas que se
abrieron esa semana en loscampamentos.

«Estoy seguro de que las agencias humanitarias están haciendo
todo lo posible para llegar a aquellos que necesitan su ayuda»,
dijo N’Dour. «Tenemos la responsabilidad de hacer lo posible para
poder llegar a todos los niños, para poder cubrir sus necesidades
inmediatas, garantizar su salud y que estén protegidos de todo
daño.»

N’Dour subrayó la necesidad de un esfuerzo
colectivo, involucrando a los líderes africanos y las
comunidades locales, para evitar el ciclo anual de sequía y
enfermedades en la región.

«Con los recursos y conocimientos disponibles en el mundo hoy,
me parece intolerable que veamos estas situaciones de emergencia
una y otra vez», dijo.

«Las naciones, los líderes y las comunidades africanas, junto
con otros líderes mundiales, deben priorizar soluciones duraderas.
Esto significa el fortalecimiento de los gobiernos para que
realicen inversiones adecuadas en los servicios básicos, defiendan
la paz para que las personas no se vean obligadas a huir de sus
hogares y medios de vida, protejan el medio ambiente para que los
pueblos tengan un modo de vida sostenible, y capaciten  a las
comunidades locales, que es de donde surgirá el proceso de
cambio”.