La emblemática construcción de la calle Seis de Junio alberga desde hace más de cuatro décadas la UNED en Valdepeñas y forma parte del patrimonio cultural de la Ciudad del Vino

Este 2025 se cumplen 80 años desde que se colocó la primera piedra del edificio que hoy alberga la sede provincial de la UNED en Valdepeñas. Fue el 18 de febrero de 1945 cuando comenzaron las obras del inmueble que, en sus orígenes, fue concebido como sede del Banco de España. Ochenta años después, esta singular edificación, que aún conserva en su sótano las imponentes cajas fuertes de la antigua entidad bancaria, es mucho más que un vestigio arquitectónico: es un símbolo vivo del compromiso de la ciudad con la educación y el conocimiento.

 

Pero la historia se remonta aún más atrás. El Banco de España comenzó su actividad en Valdepeñas en 1928, en un edificio anterior situado en la calle Capitán Fillol, que años antes había sido sede del Círculo Republicano y hoy alberga un hotel. Con la expansión económica impulsada por el vino y las industrias bodegueras, la institución decidió levantar una sede propia en la calle Seis de Junio. La Guerra Civil retrasó los planes y no fue hasta la posguerra, en 1945, cuando comenzaron las obras del edificio actual, proyectado por el arquitecto José Yánoz Larrosa.

 

El inmueble destaca por la calidad de sus materiales —piedra y ladrillo rojo que evoca los tonos de la tierra manchega— y por detalles que reflejan su función original, como la seguridad de sus instalaciones o la planta noble con suelos de mármol y la antigua puerta giratoria. Las plantas superiores, en su día destinadas a viviendas para empleados del banco, hoy están sin uso y requieren una urgente rehabilitación.

 

Tras el cierre de la sucursal en 1978, el edificio fue adquirido por el Ayuntamiento y tuvo un uso efímero como sede judicial. Pero pronto encontró su nueva vocación: en 1979, la recién llegada UNED comenzó a utilizar sus aulas para ofrecer educación universitaria a los habitantes de Valdepeñas y su entorno. Desde entonces, miles de estudiantes han pasado por sus aulas, convirtiendo esta sede en una pieza clave para el desarrollo social, educativo y económico de la provincia. A mediados de los años 90, la Diputación Provincial impulsó la ampliación de las instalaciones con un nuevo edificio anexo, ubicado en el antiguo jardín del banco, para responder al creciente número de estudiantes y mejorar los servicios educativos.

 

Hoy, ochenta años después del inicio de su construcción y más de cuatro décadas al servicio de la Educación, el antiguo Banco de España de Valdepeñas sigue siendo un referente, aunque necesitado de una nueva intervención que devuelva la vida a sus espacios vacíos. Como bien señalan desde UNED Ciudad Real, el edificio merece seguir cumpliendo su misión y “prestando el interior de sus espacios, hoy vacíos y en silencio, a la universidad, a la docencia y, en definitiva, a la ciudad”.